
La comida de Perú posee una lista interminable de productos o ingredientes exóticos. Más allá del valor culinario de éstos, el uso de manera sistemática en los más variados platos, pone de manifiesto una defensa del patrimonio cultural a través de la gastronomía.
El valor cultural de los ingredientes exóticos
La mayoría de los ingredientes exóticos que podemos encontrar en la cocina peruana, son herencia de las antiguas civilizaciones prehispánicas y de allí su enorme valor cultural.
Perú ha logrado, como lo hemos señalado en otros artículos, una fusión con diferentes cocinas del mundo, y esto ha sido posible conservando las tradiciones culinarias de miles de años atrás.
Muchos de los productos e ingredientes que hoy participan de la gastronomía peruana, como el mote peruano o la lúcuma, son legados de culturas tan vigorosas e importantes como la Inca o la Mochica.
El famoso mote
Cuando hablamos del mote peruano suele producirse una gran confusión porque se asocia al mote con un plato determinado, pero en realidad el mote es una forma de cocción de los cereales y legumbres. Se hierven en agua con cal o con cenizas.
El mote peruano más conocido y tradicional es el elaborado a partir de maíz, sobre todo del maíz blanco. El nombre de mote proviene del quechua.
Muchos países de América Latina tienen sus propias recetas de mote, aunque no lo llamen de esta forma. Por ejemplo, en Argentina la tradicional mazamorra es lo más parecido al mote peruano.
Lúcuma, la reina de las frutas
Fruto del árbol de Lúcumo, la lúcuma es una fruta tan típica de Perú que es muy difícil encontrarla en otros mercados mundiales, salvo aquellos que se dedican a importar productos exóticos.
La lúcuma es una fruta de cáscara verde, su peso puede variar entre los 100 y 1000 gramos. Su pulpa tiene una consistencia más bien arenosa y su sabor es muy dulce y con mucha fragancia.
La lúcuma es una de las bases de la repostería peruana y podemos encontrar variedades de helado de lúcuma.
El uso de esta fruta es tan ancestral que se han hallado restos de cultivos de lúcuma que datan de 8 mil años antes de Cristo. Numerosas han sido las culturas prehispánicas de Perú que han dado valor a esta fruta que crece exclusivamente en tierras peruanas.
El viagra de los Incas
Este tubérculo que crece en las alturas de los Andes, es similar a un rábano o a una remolacha pequeña. Y era muy utilizada por la cultura incaica, que le atribuía propiedades afrodisiacas.
La maca puede prepararse de forma similar a la papa, ya sea hervida o asada.
De la harina de maca, la cocina peruana ha aprovechado sus propiedades para la elaboración de galletas y bizcochos.
Una bebida muy popular en Perú es la chicha que se prepara en base a la fermentación de este tubérculo andino.
Un ají típicamente peruano
La cocina peruana ha incorporado un ají, que orgullosamente pueden definir como propio. El rocoto se destaca por su aroma y su exquisito sabor con un dejo picante muy particular.
La gastronomía peruana incorpora este fruto para la elaboración de distintos platos y como condimento indispensable en toda la cocina.
Podemos encontrar al rocoto como ingrediente principal en ajíes rellenos, pero también como complemento en la preparación de los famosos tiraditos o el cebiche.
El olluco, la papa de los Andes
Desde hace más de 5 mil años, en Perú, sobre todo en su zona andina, se cultiva un tubérculo pequeño, conocido como olluco.
Su color es amarillo pálido con vetas rosas y moradas y la cocina peruana le ha dado uso tanto al tubérculo como a las hojas de esta planta.
El olluco ha calado tan hondo en la cocina peruana que el 5 de octubre de cada año se celebra en las zonas andinas el Día del Olluco.
Son numerosos los platos de la gastronomía de Perú que tienen al olluco entre sus principales ingredientes. En tanto que las hojas, con un sabor muy similar al de la espinaca, son utilizadas para la preparación de sopas y ensaladas.
Este ha sido un breve recorrido por los productos más exóticos y típicos de la cocina peruana. Este país puede ofrecer, orgulloso, una vasta variedad de productos propios, originarios de las tierras que antiguas civilizaciones habitaron y que dejaron a modo de herencia cultural a las generaciones venideras.
La cocina peruana es un homenaje de sabores, aromas y colores a estas antiguas tradiciones.