Los fines de semana a veces nos dejan agotados, pero en el Perú, hay platos que revitalizan, como la sopa de mote o patasca, conocida por su poder de "levanta muertos".
Esta nutritiva sopa se encuentra fácilmente en todo el país y muchos la prefieren como parte del desayuno para empezar el día con energía. Pero, ¿de dónde viene esta sopa milagrosa y cómo se prepara? Aquí te lo contamos.
¿De dónde viene?
Sopa de mote
La sopa de mote o patasca es un caldo delicioso y muy popular y se acostumbra consumir para combatir el frío Además de ser delicioso es muy nutritivo.
La patasca es un plato con raíces prehispánicas. En aquellos tiempos, se preparaba con carne de alpaca, cuy, aves y hierbas locales.
El jesuita Bernabé Cobo, en el siglo XVII, escribió sobre un guisado llamado "motepatasca", elaborado con maíz cocido hasta reventar. A fines del siglo XVIII, el escritor y poeta español Esteban Terralla y Landa mencionó la patasca como un potaje común en Lima.
El mote, ingrediente principal de la patasca, es una excelente fuente de energía gracias a sus carbohidratos complejos y alto contenido de fibra, que mejora la digestión y proporciona una gran sensación de saciedad.
La Patasca peruana
En los Andes, la patasca es una sopa popular, sustanciosa y nutritiva, ideal para combatir el frío. Se sirve caliente, a menudo como desayuno, y es conocida por su gran concentración de sabores, provenientes de los diversos ingredientes utilizados.
En el Perú, la patasca se prepara con mondongo, carne de res, mote y, en algunas regiones, la cabeza del carnero, lo que le da un sabor único.
El nombre patasca se refiere al maíz o trigo pelado y reventado, cocido por horas junto con carne de res, carnero, mondongo, patas de ternera y hierbas andinas. Esta sopa refleja la rica tradición culinaria de la región.
La forma tradicional de prepararla
Patasca peruana
La patasca peruana, cuyo nombre proviene del quechua "phatasqa", es un delicioso caldo tradicional que se disfruta en las zonas altas de los Andes del Perú. Esta reconfortante sopa se prepara con mondongo y carne, creando una mezcla totalmente reconfortante y deliciosa.
Para hacer una rica sopa de mote hay que remojar el maíz la noche anterior, lavarlo y ponerlo a hervir por dos horas.
Luego, agrega las carnes, el mondongo y las ramas de hierbabuena y orégano. Cocina por dos horas más, añadiendo agua hervida y sal al gusto.
Después, añade el morón partido para espesar un poco el caldo, rectifica la sazón y sirve de inmediato.
Normalmente, se presenta con carne de cordero, pecho de res y mondongo, espolvoreado con hierbas, rocoto y limón.
Así que, la próxima vez que te sientas agotado, prueba un tazón de patasca. Esta sopa ancestral no solo te calentará, sino que te llenará de energía y te conectará con las ricas tradiciones culinarias del Perú. ¡Buen provecho!
